Edmund Emil Kemper III : "El asesino de las colegialas"

KEMPER
Edmund Emil Kemper III (18 de diciembre de 1948; Burbank, California), más conocido cómo Edmund Kemper, es un asesino en serie al que también se le conoce cómo El asesino de las colegialas (Co-ed killer, en inglés) y que estuvo activo en la década de los 70.

El hijo de Edmund Emil Kemper Jr. y Clarnell Stage poseía un cociente intelectual de 136 y desarrolló un comportamiento sociopatológico desde muy joven: torturaba y asesinaba a animales, representaba rituales sexuales bizarros con las muñecas de sus hermanas y llegó a decir que, para besar a una maestra por la que se sentía atraído previamente tendría que matarla. Sus Padres se divorciaron

Clarnell Stage (Madre)
Si ya de por sí Kemper era extraño, su madre - de la cual se sospecha que era borderline - le obligaba a dormir en el sótano por miedo de que su hijo abusara de sus hermanas, algo que molestó a Edmund.

La separación de sus padres significó un duro golpe al joven Ed Kemper quien gozaba buena identificación con su padre, mas no con la madre con quien finalmente pasaría el resto de su tiempo. Tras el divorcio, Ed y sus otras dos hermanas, una mayor por 6 años y otra menor por 2 y medio se fueron a vivir a Montana con la señora Clarnell.

La infancia de Ed Kemper a quien apodaban Guy, fue de muchos sinsabores padeciendo constante abuso emocional de su madre. Con el tiempo nació en el gran odio hacia Clarnell quien decidió encerrar al chico en las noches temiendo que fuera a molestar sexualmente a sus dos hermanas. Y es que aquella era una familia de gigantes. La señora Kemper medía 1.80 metros mientras que el padre alrededor de los 2 metros.



Edmund Emil Kemper Jr (Padre)
Por el tamaño de Ed y sus extrañas conductas, la madre tomaba las precauciones necesarias. En retrospectiva el mismo Ed Kemper cree que su madre tenía algo de razón en encerrarlo. Según testimonio de las hermanas, el chico tenía la mala costumbre de descabezar sus muñecas y de efectuar en todo momento extraños juegos donde simulaba su propia ejecución y muerte.

La gente de la escuela determinó que Ed Kemper era extremadamente fantasioso. Constantemente lo pillaban soñando despierto y por esta situación y seguramente por otras cosas, le fue impuesto asistir dos veces por semana con un psicólogo de la escuela. Para Kemper estas sesiones eran rutinarias, cosa de siempre y durante la primaria y la secundaria asistía con regularidad. Durante la consulta los consejeros hacían de todo menos tratar los asuntos importantes.

De acuerdo a los conocedores, Kemper ya fantaseaba con las mujeres en términos sexuales desde la tierna edad de 10 años. Sin embargo estas fantasías estaban pobladas de muerte y violencia. Por fuera Kemper aparentaba afabilidad y calma mientras que por dentro vivía una realidad alterna donde deseaba ver morir a la gente a su alrededor, muchos a manos suyas.

Ed Kemper

Como se ha estudiado extensamente, los asesinos seriales son profundamente crueles con los animales durante su infancia, porque estas criaturas son sus primeras víctimas, a escala si así se desea, pero víctimas de su enojo y violencia internas. Kemper mato varios gatos, incluso enterrando vivo a uno para después decapitarlo y montar la cabeza en una pica. Clarnell halló los restos de un gato metidos en el closet de su hijo. Cuando se le pedían explicaciones de sus bizarras actividades Kemper siempre salía con alguna mentira muy bien elaborada, tras lo cual reforzaba su cinismo y refinaba su metodología.

A los 13 años Ed Kemper deja su casa para irse a vivir con su padre. En un principio el señor lo recibe bien, pero como se había vuelto a casar y tenía un hijo pequeño, la presencia de su enorme hijo Ed Kemper resulta incómoda así que tras un corto tiempo de estancia lo devuelve a su madre. Defraudado por su padre ahora es rechazado por su madre, pues la señora ya tenía planeado un nuevo matrimonio y al estorbarle lo envía con sus cosas a vivir con sus abuelos paternos, la señora Maude y el señor Ed Emil Kemper quienes poseían un rancho de 17 acres en California. Si bien lo que ya no quería era padecer los abusos de su madre, ahora se encuentra conque Maude es similar o peor. Siempre regañándolo y diciéndole que hacer y que no, Kemper piensa que alguien y que mejor que su abuela, tiene que pagar todos los platos rotos. Poco a poco la furia debida a su aislamiento y sus bizarras fantasías va incrementándose en el joven Edmund como una olla a presión. Entrevistado después de su detención Kemper dijo que si acaso alguien le hubiera ayudado a disminuir su estrés, pero que siempre era al contrario, las personas solo conseguían enfurecerlo más.

ASESINA A SUS ABUELOS
El 27 de agosto de 1964, a los 15 años, Edmund tiroteó a su abuela - con la que vivía en un rancho de unas 7 hectáreas- mientras ésta estaba terminando su último libro para niños.

Tras escenificar una gran discusión con su abuela Ed Kemper tomó su rifle, el mismo que su abuelo le había obsequiado la Navidad pasada. Entonces Maude Kemper le dijo que no fuera a dispararle a los pajarillos y acto seguido Ed se volteó y le soltó un disparo a la cabeza y luego dos tiros más por atrás.

Muy crecido y desarrollado físicamente, no tuvo problemas para mover el cadáver de su abuela. Cuando el viejo Ed Kemper regresó a la granja tras ir por un mandado, fue asesinado también. Edmund se había sentado a esperarlo pacientemente y tiempo después dijo que había decidido que su abuelo no debía enterarse que su nieto había asesinado a su esposa.

No sabiendo que hacer, Ed llamó a su madre a Montana y ella le pidió que hablara a la policía. Una vez en custodia a la pregunta del porque lo había hecho simplemente respondió "Solo quise saber que se sentía matar a los abuelos..." Irónicamente la madre de Ed Kemper había advertido a su ex esposo que no se sorprendiera si un día su hijo mataba a sus abuelos.

Las declaraciones que dio a los agentes fueron las siguientes: él "sólo quería ver qué se sentía al asesinar a su abuela" y mató a su abuelo porqué sabía que se enfadaría por haber matado previamente a la abuela.

Fue puesto en manos de la autoridad juvenil de California quienes lo recluyeron un corto tiempo en el hospital estatal de Atascadero. Ahí se le practicaron las pruebas psicológicas de rigor que determinaron que poseía un coeficiente intelectual casi de un genio. Además de que padecía esquizofrenia paranoide.

Al hacerse amigo de su psicólogo, se convirtió en su asistente. Debido a su inteligencia, se ganó tal confianza del doctor que se le permitió el acceso a las pruebas aplicadas a otros internosy gracias al aprendizaje que obtuvo de estas pruebas impresionó a su médico y consiguió el alta siendo puesto en libertad en contra de la opinión de numerosos especialistas que conocían su caso.

A simple vista el joven Kemper era socialmente inadaptado, había demostrado ser de sangre fría además de que su sola estatura, asustaba. El comité de libertad condicional que dictaminó su caso carecía de psicólogos y especialistas que objetaran la moción, de ese modo fue entregado a su madre en Santa Cruz, California.

Tras salir de su reclusión, se metió en diferentes empleos menores en los cuales duro poco tiempo. Con su dinero ahorró lo suficiente para salirse de casa. Algún tiempo vivió en un departamento junto a un amigo, pero generalmente andaba sin un quinto y eventualmente regresaba a casa de su odiada madre. Se compró una motocicleta pero se reporta que tuvo un par de accidentes, tras el último recibió una generosa compensación monetaria que uso para comprarse un automóvil. Finalmente obtuvo un empleo en el departamento de caminos de California.

EL RATRO DE UN ASESINO

Kemper - de 2.05 m y más de 136 kg - trabajó en diversos sitios hasta llegar al Departamento Californiano de Transporte, en aquella época conocido cómo el Departamento de Obras Públicas en la División de Carreteras en el Distrito 4.

Hay que notar que el gran sueño de Ed Kemper era convertirse en policía. Para su desventura, dada su estatura de más de 2 metros era inelegible para ocupar una vacante. Tuvo que conformarse con acercarse a los policías con quienes solía sentarse a comer y a platicar historias. También entraba a escuchar las audiencias judiciales y así por el estilo. Los oficiales se referían a el como "Big Ed" Más tarde ocupaba tales reuniones para otear la situación, para saber cuales eran los progresos o retrocesos de la policía para capturar al asesino de colegialas.

Clarnelle trabajaba como asistente administrativa en la Universidad local y cuando Ed le pidió que le presentara alguna de las chicas que ahí estaban, la señora le dijo que Ed era igual que su padre, que no merecía conocer esas chicas. Ellas eran demasiado para el. Esta clase de respuesta lo enfurecía así que decidió tener a esas chicas, pero en sus propios términos. Como ya tenía coche al manejar pos las avenidas y carreteras circundantes se dio cuenta de la enorme cantidad de mujeres que se transportaban pidiendo aventón. Aquella manera de moverse era muy acostumbrada en esa época particularmente en California, donde el movimiento hippie había pegado mucho recientemente. Al ver todas aquellas muchachas Edmund comenzó a imaginar las cosas que podría hacer con ellas y decidió llevar a cabo sus morbosas fantasías y se abasteció de los implementos necesarios: mantas, esposas, bolsas de plástico, etc.

Pero una cosa es la fantasía y otra la realidad. Antes de echarle mano a cualquier chica, Ed dio aventón a muchas de ellas sin hacerles daño. Era experto en hacer sentir confianza a las personas a pesar de que era incapaz de entablar comunicación afectiva y sexual con las muchachas. Se decía aterrado ante la perspectiva de fallar en la relación hombre-mujer. Pero un día tenía que comenzar la matanza y así fue.

Entre mayo de 1972 y febrero de 1973, Kemper mató a diversas estudiantes que encontraba en la autopista, a las cuales llevaba a zonas rurales aisladas para matarlas - acuchillándolas, con arma de fuego o asfixia - y después trasladarlas a su apartamento donde practicaba necrofilia con posterior disecación. Normalmente, arrojaba los cuerpos a barrancos o los sepultaba en campos, pero en cierta ocasión enterró la cabeza de una víctima - de 15 años - en el jardín de su madre en una especie de broma enfermiza: él "siempre quiso que las personas la admiraran". Asesinó a 6 colegialas, incluyendo dos estudiantes de la Universidad de California - donde trabajaba su madre - y una del Cabrillo College. Curiosamente, después de discutir con su madre es cuando cometía los asesinatos.

Cronicas de asesinato

Anne Pesce

El 7 de Mayo de 1972 Mary Anne Pesce y Anita Luchese desaparecieron sin motivo alguno. 

Al parecer habían salido del Fresno State College y se dirigían a ver a unas amistades a la Universidad de Stanford. 

A pesar de que los familiares reportaron el incidente a la policía, la carencia de información y alguna buena pista impidieron a esta hacer gran cosa. Además se sospecho que las chicas podrían haber huido de su casa. 


Anita Luchese

Días después, el 15 de Agosto fueron hallados los restos de un cráneo de mujer. Fue identificado como de la señorita Pesce, y pronto se supuso que ambas habían encontrado la muerte de forma violenta. 




Aiko Koo
El 14 de Septiembre la desaparecida fue la señorita Aiko Koo, estudiante de danza que pedía aventón en el área de Berkley. 

Luego, el 8 de Enero de 1973 Cindy Schall de 18 años desapareció cuando iba de aventón a sus clases en una escuela pública del lugar. 

Había pasado a la casa de un amigo suyo y después un testigo afirma haberla visto tomar un raid con alguien y eso fue todo. 

Cindy Schall
Algunos días después comenzaron a aparecer las partes de su cuerpo. Los brazos en una colina, el torso y piernas fueron traídos por la marea a la playa. 

Por huellas digitales y radiografías se pudo efectuar una identificación positiva del cadáver de la señorita Schall.  


El 5 de Febrero de 1973 desaparecieron otras dos muchachitas que pedían aventón. 

Allison Liu
Se llamaban Rosalind Thorpe y Allison Liu. El 4 de Marzo un par de corredores encontró una quijada no lejos de la carretera en el condado de San Mateo. Tras el peinado de la zona pudieron hallarse más restos que correspondían a las chicas recientemente desaparecidas.

Thorpe había recibido un balazo en la cabeza, la señorita Liu dos. La policía estaba impotente pues carecía de pistas y pesaba sobre la institución la mordaz crítica de numerosos medios de comunicación que por su parte en nada ayudaban y si exageraban y especulaban sobre la ola de criminalidad que asolaba a la ciudad. 
Rosalind Thorpe

Había que tomar en consideración que realmente había muchos problemas. Días antes había sido detenido el lunático Herbert Mullin quien asesinó numerosas personas y la agitación provocada por el juicio del hippie psicópata Linley Frazier no terminaba de disiparse. Y por esto, Santa Cruz era llamada la capital mundial del asesinato 

Hasta la Universidad se vio afectada por la ola de homicidios. La tasa de inscripciones bajo dramáticamente y se tuvo que implementar el servicio de autobús para transportar a los estudiantes que vivían fuera del campus.

LA CRUEL MATANZA DE UNA MADRE
En abril de 1973,  tocó el turno de la madre de Kemper hallar la muerte a manos de su hijo. Circulan muchos detalles al respecto, que si fue una venganza, que si llegó medio borracha la señora y Kemper aprovechó, que si discutieron antes del crimen, etc.

Clarnelle, madre de Ed Kemper
Es macabro exponer los hechos de su cruel asesinato. Kemper golpeó repetida y violentamente a su madre hasta matarla con un martillo de zapatero, mientras ésta dormía. La decapitó, la violó sin cabeza - la cual usó como diana posterior mente para "jugar a los dardos"- le arrancó la lengua y las cuerdas vocales y las arrojó al triturador de la cocina. En su declaración, Kemper dijo que "eso parecía apropiado, tanto como ella me maldijo, gritó y chilló por muchos años".

Pero la cosa no quedo ahí: salió de la casa y sin mencionar el incidente tomó unos tragos con sus amigos, los policías, regresó a casa e ideó asesinar a una amiga de las mejores amigas de su madre, la señora Sally Hallett a quién llamo para invitarla a cenar y a ver una película. Cuando aquella desafortunada mujer llegó, Kemper la golpeó y la estranguló. Permaneció en casa con ambos cuerpos pero se dio cuenta que el final había llegado.

Inevitablemente el asesinato de su madre le sería adjudicado. Tomó el automóvil de Sally y condujo miles de kilómetros, sin embargo Kemper esperaba escuchar en la radio algún flash informativo sobre el hallazgo de los cuerpos, se dirigió con el coche hacia el Este, sin escuchar en la radio ninguna noticia sobre sus asesinatos. Desilusionado, frenó y llamó a la policía para confesar que él era El asesino de las colegialas. Les confesó qué había hecho y donde podía encontrarle, además de reconocer su necrofilia y canibalismo.

CONFESIONES

Levantamiento cadaveres casa Kemper
Luego ocurrió lo inesperado. La policía de Santa Cruz recibió una llamada. El hombre decía que deseaba entregarse, que era responsable del asesinato de varias colegialas y de su propia madre. Era tan sorprendente que los oficiales no podían creer la historia. Los policías que conocían a Big Ed creían que los estaba engañando con algún tipo de broma pesada.

Sin embargo Kemper insistió y pidió que el sargento Aluffi, quien conocía su hogar y le había confiscado un arma hacía un tiempo, fuera a su casa para corroborar la historia. Y así lo hizo Aluffi, que al llegar al lugar detectó inmediatamente el olor a muerto, y cuando vio pelos y sangre en un closet llamó a los demás y al forense. Fueron recuperados los cadáveres de Clarnell Strandberg y de Sally Hallett en las condiciones exactas en que Kemper había hecho la denuncia. Entonces una comitiva de varios agentes fue hasta la ciudad de Pueblo, Colorado donde Ed Kemper los esperaba pacientemente para ser detenido. Tan inteligente era, que él mismo sabía que era un peligro y que no podía estar en libertad.

Sargento Chang, integrante de la comitiva que detuvo a Kemper
Tras su detención, sin mostrar remordimiento alguno y como en un acto de compulsión, Kemper confesó todos y cada uno de sus crímenes a todo aquel agente y autoridad que quisiera escucharlo. 

El día que secuestra a Pesce y Luchesa su intención era violar, súbitamente no era una víctima sino dos las que habían caído en sus manos. En Atascadero los violadores comentaban que era preferible no dejar víctimas que posteriormente delataran, recordando este detalle la suerte de las chicas estaba decidido. Al principio estaban muy contentas por la suerte de hallar quien las acercara hasta Stanford pero la alegría se tornó en terror cuando Ed les informó sus verdaderas intenciones. En un paraje solitario comenzó el final, las apuñalo y estrangulo para luego guardar sus cuerpos en la cajuela del carro. Regresó a su departamento y procedió a mutilar los cuerpos, de vez en cuando les tomaba fotografías y practicaba actos sexuales con los despojos. Poseer aquellos cuerpos por completo era motivo del más elevado éxtasis para Kemper. Cuando terminó empacó los restos en bolsas de plástico que enterró en lugares solitarios; las cabezas fueron lo último de lo que se deshizo.

Kemper guiando a los oficiales para buscar restos humanos
Luego continuó su labor de buen samaritano dando aventón a cuanta chica podía, mientras manejaba incluso platicaba del asesino que secuestraba señoritas en las carreteras, siempre evaluando a cada posible víctima. Hasta que el 14 de Septiembre de 1972 tocó turno a Aiko Koo. Cuando sacó su arma la chica quedo aterrada. Kemper narra que en un momento dado dejo el arma en el asiento delantero, salió del vehículo, con el seguro puesto. La chica tuvo la oportunidad de tomar el arma pero en vez de eso ella misma le abrió la puerta. Entonces le tapo las narices para desmayarla. La violó y luego la estranguló. Se fue a tomar unos tragos y llevó el cadáver a su casa para darle el mismo tratamiento que a las dos primeras víctimas. Una vez que había probado su enorme poder contra las mujeres sabía que pronto iba a requerir de más víctimas.
Increíblemente, al día siguiente de tomar la vida de Aiko Koo, Kemper asistió a su audiencia obligatoria con el panel de psiquiatras que monitoreaban su libertad condicional. Ya estaba preparado para responder a todas las preguntas, sabía a la perfección lo que los doctores querían escuchar de él. Y en efecto aquellas personas lo encontraron sano y competente al punto de cerrar su expediente juvenil. Mientras tanto, la cabeza de Aiko Koo estaba guardada en el automóvil de Kemper y los doctores se felicitaban asimismo por ser parte de un sistema de salud pública que curaba a asesinos menores de edad.

Feliz con el engaño del comité de libertad condicional, Kemper se sintió con más libertad para llevar a efecto sus torcidas fantasías. A propósito de ellas, guardaba fetiches y souvenires de sus pasadas aventuras para tener siempre presente el recuerdo de los crímenes (Foto de la derecha).
Los trofeos del Asesino

Llegó el año de 1973 y el 8 de Enero la señorita Cindy Schall aceptó un aventón con Ed Kemper. Instantes después la condujo a un área solitaria y le disparó rápidamente. Esta vez no estaba interesado en torturarla sino que deseaba rápidamente poseer un cuerpo para sus regodeos sexuales. Una vez más vivía al lado de su madre así que llevó el cadáver a la casa de esta. Kemper disfrutaba enormemente el riesgo de ser descubierto por algún vecino pues no era muy precavido para ocultar sus obscuras actividades. Desmembró el cuerpo enterrando la cabeza en el jardín de la casa a modo de broma declarando posteriormente que "Al fin y al cabo, había enterrado la cabeza ahí dado que su madre siempre deseaba que todo mundo la viera hacia arriba..." Como ya sabemos, las demás partes de Schall fueron apareciendo en la playa.

Se dice que después de una fuerte pelea entre Kemper y su madre, éste sale a ventilar su furia de nuevo. Es el 5 de Febrero de 1973 y aprovechando un tarjetón de la Universidad que su madre le había dado, rapta a un par de chicas de nombre Rosalind Thorpe y Allison Liu. Había subido primero a Thorpe así que Liu se confió al ver a otra muchacha. Un rato más tarde, tras titubear unos segundos, Kemper apuntó y disparó a Thorpe, luego tuvo que disparar varias veces a Liu pues comprensiblemente, se movía mucho para salvar su vida. Gracias al tarjetón, los guardias de la puerta de la Universidad lo dejaron pasar. Llevó los cadáveres a casa de su madre donde los descabezó y los tuvo para su enfermo deleite sexual. Nuevamente nadie descubrió sus actividades ni mucho menos la policía guardó sospecha alguna. 

 ACUSADO
El 7 de Mayo de 1973 Kemper es formalmente acusado de 8 asesinatos en primer grado. Como Kemper había cantado absolutamente todo sin la asistencia de un abogado, ahora para su abogado defensor le resultaba complicado argumentar locura o incapacidad para afrontar el juicio. Además estaba el hecho de la inteligencia y gran coherencia que Kemper tenía para expresarse. Tras la consulta de especialistas y estudiosos se determinó que mientras hubiera premeditación, ventaja y el acusado conociera la diferencia entre el bien y el mal, no podía argumentarse incapacidad mental.

Kemper sonrie en una de sus entrevistas con los Especialistas
Y así fue juzgado Kemper. Además el mismo se declaró culpable y hasta pidió la pena capital. Hay que notar que trató hasta dos veces suicidarse sin éxito. Pero la pena capital estaba suspendida en ese tiempo en California y recibió cadena perpetua. La moción se dio tras un rápido juicio de 3 semanas y una deliberación de aproximadamente 6 horas por parte del jurado.

Como preso, el comportamiento de Kemper ha sido modelo. Siempre ha sido cooperativo y amable incluso se ha ofrecido para leerle a los ciegos. Una vez solicitó que se le practicara neurocirugía para eliminar los tejidos cerebrales responsables de sus impulsos sexuales. Sin embargo aquello le fue negado. Al comité de libertad condicional les dijo que no creía estar listo para ser dejado libre. Para beneplácito de numerosos investigadores, Kemper ha colaborado en los estudios de varios de ellos ampliando nuestra comprensión acerca de los predadores sexuales de nuestro tiempo.

Durante su juicio alegó locura, aunque fue hallado culpable de 8 cargos por asesinato. Pidió la pena capital, pero, al estar suspendida en Estados Unidos en aquel momento, recibió la cadena perpetua. Actualmente es uno de los presos de la Prisión Estatal de Vacaville.

Edmund Kemper, Herbert Mullin y John Linley Frazier
Contemporáneo a Kemper, Mullin también asesinó a diversas personas, por lo que la ciudad fue bautizada cómo la Capital mundial del asesinato. Ambos asesinos llegaron a estar encerrados en celdas contiguas y Kemper estaba enfadado con Mullin porqué decía que éste le "robaba los sitios en los cuales descargaba sus cadáveres".

Además, tres años después de esta ola de asesinatos, John Linley Frazier continuó con ellos. De una manera similar al conocido asesino Charles Manson, Frazier mató a los cinco miembros de la familia del cirujano ocular Víctor Otha.

Una referencia de la Capital del asesinato aparece en la película Jóvenes ocultos (1987), rodada en Santa Cruz (California).

Las Víctimas de Ed Kemper

  • Maude Kemper 27 de agosto de 1964
  • Ed Emil Kemper 27 de agosto de 1964
  • Mary Anne Pisce 5 de mayo de 1972
  • Anita Luchese 5 de mayo de 1972
  • Aiko Koo 14 de septiembre de 1972
  • Cindy Schall 8 de enero de 1973
  • Rosalind Thorpe 5 de febrero de 1973
  • Alice Lui 5 de febrero de 1973
  • Clarnell Strandberg 21 de abril de 1973
  • Sally Hallett 21 de abril de 1973
Edmund Kemper Interview





Comparte este Post en tu Red Social Favorita

1 comentario:

  1. Mi asesino en serie favorito! Me fascina este tipo!... La madre fue muy zorra con él en su infancia.... no es de extrañar que perdiera la pinza....

    ResponderEliminar

MAPA DESAPARECIDOS


Ver Desaparecidos - Missing People en un mapa más grande

Juego de ingenio y Logica ONLINE ¿Te atreves?

 

Recomendaciones, Agradecimientos, Notas y Creditos

En Criminal Descubierto aceptamos Publicaciones. Si deseas Publicar un articulo, escribe a criminal-descubierto@live.com y tras revisar contenido se realizara la publicación. También se acepta complementación de información de lo ya publicado.Toda la información de este blog ha sido recopilada bajo investigaciones vía red publicadas ya existentes, por lo que si existiera alguna foto con derechos de Copyright Infórmenos y añadiremos fuente o propietario bajo la misma.
Gracias a todos los colaboradores de este Blog, dando especial mención a Tata por sus interminables aportes de información.
Un gran abrazo a Marco Besas desde este mi espacio en el cual siempre sera bienvenido.