Nueva
línea de investigación en el caso de los niños desaparecidos en
Córdoba. La Policía va a intentar recrear el recorrido que hizo José
Bretón en el coche, y esclarecer si salió de Córdoba, a través de las
grabaciones de cámaras de seguridad en carreteras y gasolineras. Los
agentes ya han visionado las imágenes grabadas por una cámara de un
Centro de Inserción Social situado frente a la finca de Las Quemadillas,
propiedad de la familia paterna. En ellas se puede ver un coche
parecido al de Bretón entrando en la finca y saliendo pasadas unas
horas.
Se buscan pistas de Ruth y José, los niños desaparecidos en Córdoba el pasado 8 de octubre,
en cámaras de seguridad situadas en carreteras y gasolineras por donde
pudo pasar el coche de José Bretón, según recoge la edición digital de
Diario de Córdoba. La Policía pretende así recrear el recorrido en coche del padre de los niños para intentar esclarecer si salió de Córdoba y si no en qué momento se les pudo perder el rastro.
También se supo hace unos días que la Policía había solicitado visionar las imágenes grabadas por una cámara del Centro de Inserción Social Carlos García Valdés situado frente a la finca de Las Quemadillas, propiedad de la familia paterna. Ha trascendido que en ellas se puede ver un coche con características similares al de José Bretón entrando en la finca y saliendo pasadas unas horas... sin que quede clara la matrícula del mismo.
La cámara está instalada a unos siete metros de altura y dista unos 300 metros de la puerta de la parcela, lo que no ofrece una definición de calidad.
CUATRO HORAS MALDITAS
No es la primera vez que la Policía trata de reconstruir lo que pudo suceder la tarde del 8 de octubre entre las 14:30 horas (cuando salieron de la finca de Las Quemadillas tras comer con los abuelos paternos) y las 18:40 horas (cuando José Bretón denunció telefónicamente la desaparición de sus hijos cuando, según su versión, se encontraban jugando en el Parque Cruz Conde de la capital cordobesa).
Fue unas horas antes de que se ordenara el ingreso en prisión del padre de los pequeños. José Bretón narró su versión desde el parque donde supuestamente había perdido a sus hijos en un despiste. Señaló incluso el banco donde dijo que estaba sentado cuando los vio por última vez. Durante la reconstrucción fue increpado por vecinos y curiosos que se dieron cita en el parque para acusarle directamente de la desaparición de Ruth y José. La versión que contó entonces, que es la que mantiene desde el principio, no es apoyada ni por testigos, que no tiene, ni por las cámaras de seguridad aledañas a este recinto infantil, que no recogen imagen alguna de José Bretón con sus hijos.
José Bretón, de 38 años, se encontraba en proceso de separación de su mujer Ruth Ortiz cuando desaparecieron los niños. Ellos vivían con su madre en Huelva y habían acordado que podría verlos cada fin de semana. Ese era el primero que los recogía desde Huelva.
SEGÚN SU ABOGADO, BRETÓN ESTÁ "HUNDIDO"
Por otra parte, el abogado del progenitor de los menores, José María Sánchez de Puerta, precisó que espera a "ver cómo se resuelven los últimos datos" en torno al caso, como el registro de las cámaras, y surjan nuevas pistas en próximos días para reclamar de nuevo la libertad de su cliente.
En cuanto al estado de Bretón, interno en el centro penitenciario de Alcolea, Sánchez de Puerta aseguró que está "muy hundido, bajo de moral" y "sigue preguntando dónde están sus hijos".
También se supo hace unos días que la Policía había solicitado visionar las imágenes grabadas por una cámara del Centro de Inserción Social Carlos García Valdés situado frente a la finca de Las Quemadillas, propiedad de la familia paterna. Ha trascendido que en ellas se puede ver un coche con características similares al de José Bretón entrando en la finca y saliendo pasadas unas horas... sin que quede clara la matrícula del mismo.
La cámara está instalada a unos siete metros de altura y dista unos 300 metros de la puerta de la parcela, lo que no ofrece una definición de calidad.
CUATRO HORAS MALDITAS
No es la primera vez que la Policía trata de reconstruir lo que pudo suceder la tarde del 8 de octubre entre las 14:30 horas (cuando salieron de la finca de Las Quemadillas tras comer con los abuelos paternos) y las 18:40 horas (cuando José Bretón denunció telefónicamente la desaparición de sus hijos cuando, según su versión, se encontraban jugando en el Parque Cruz Conde de la capital cordobesa).
Fue unas horas antes de que se ordenara el ingreso en prisión del padre de los pequeños. José Bretón narró su versión desde el parque donde supuestamente había perdido a sus hijos en un despiste. Señaló incluso el banco donde dijo que estaba sentado cuando los vio por última vez. Durante la reconstrucción fue increpado por vecinos y curiosos que se dieron cita en el parque para acusarle directamente de la desaparición de Ruth y José. La versión que contó entonces, que es la que mantiene desde el principio, no es apoyada ni por testigos, que no tiene, ni por las cámaras de seguridad aledañas a este recinto infantil, que no recogen imagen alguna de José Bretón con sus hijos.
José Bretón, de 38 años, se encontraba en proceso de separación de su mujer Ruth Ortiz cuando desaparecieron los niños. Ellos vivían con su madre en Huelva y habían acordado que podría verlos cada fin de semana. Ese era el primero que los recogía desde Huelva.
SEGÚN SU ABOGADO, BRETÓN ESTÁ "HUNDIDO"
Por otra parte, el abogado del progenitor de los menores, José María Sánchez de Puerta, precisó que espera a "ver cómo se resuelven los últimos datos" en torno al caso, como el registro de las cámaras, y surjan nuevas pistas en próximos días para reclamar de nuevo la libertad de su cliente.
En cuanto al estado de Bretón, interno en el centro penitenciario de Alcolea, Sánchez de Puerta aseguró que está "muy hundido, bajo de moral" y "sigue preguntando dónde están sus hijos".
Fuente: Diario Que
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